Marta Serra, una brillante inspectora se exilia en la tranquila isla de Menorca y se enfrenta a la caza de un asesino en serie que simula sus crímenes como si fueran suicidios. Durante la investigación, descubre junto a su compañero Alex Crespo, una trama de corrupción urbanística orquestada por la mafia portuguesa, que ha decidido utilizar la tranquila isla como “guardería” para esconder mercancías.