La muerte de Anabel apunta a Sole como culpable y a este ambiente gris se suma el secuestro de la hija de Mercedes. Todas las pruebas del asesinato de Anabel apuntan a Sole y ella, cansada de luchar, se declara culpable. A pesar de las dudas iniciales Nerea accede a tener un vis a vis con Rizos. Su historia de amor es cada vez más intensa pero la estabilidad de la relación se verá afectada por una inesperada noticia.