El admirador de una famosa estrella de la pantalla sueña con poder actuar junto a ella en una película y manda su foto a un casting para que se le haga una prueba, cuando está en ello, el joven, ante la presencia real de su ídolo no da ni una y su prueba es un desastre. El chico, avergonzado, pretende disculparse ante la actriz y se dirige a visitarla a su hotel, donde es confundido por el novio de ella; esto provocará un sinfín de cómicas situaciones perfectamente resueltas por el buen hacer del director y por el genio interpretativo del gran José Luis Ozores.