Sus poderes no parecen funcionar en la Tierra y nadie les toma en serio. Vuelven a la dimensión de Tänpo y éste se escandaliza al saber que han intentado explicar lo ocurrido. Deberán mantenerlo en secreto o cundirá el pánico. Tänpo explica a los chicos que el imperio de los Zorn están invadiendo el Multiverso y que la única manera de salvar la Tierra es ganar el gran Torneo de Sendokai. Un campeonato de un ancestral arte cuya tradición dicta que solo el vencedor será indultado...Pese a la seriedad del asunto, los chicos confían en sus nuevos poderes y creen que ganar el Torneo será fácil, así que Tänpo decide retarles a un combate de Sendokai. El maestro les da una paliza y los chicos aprenden que ser un guerrero Sendokai es mucho más que tener super-habilidades: también es espíritu de sacrificio, trabajo en equipo y humildad. Mientras, el Mariscal, líder de los Zorn, comienza la invasión de varias dimensiones y revela a sus comandantes un hecho que los humanos desconocen: nadie ha vencido nunca a los Zorn en el Gran Torneo.