Keima Katsuragi es un jugador ávido de galges conocido en su escuela como "Otamega" (un término despectivo que combina las palabras Otaku y Megane) y en el Internet como "El Dios de la Captura." Un día recibe un e-mail y le ofrecen un contrato para "capturar" a las chicas. Él acepta pensando que es un reto y un demonio del infierno llamado Elsee aparece. Ella le pregunta por su ayuda en la captura de los espíritus fugitivos que se esconden en las chicas "reales". Él se niega diciendo que sólo le gustan las chicas de los juego y ella le dice que si se niega entonces le cortaran la cabeza a ambos.