Bryan (Andrew Rannells) y David (Justin Bartha) son una pareja gay de Beverly Hills, que tienen todo en la vida, una relación estable, una brillante carrera y una bonita casa, lo único que les falta en su vida es un niño. Pero las cosas cambian cuando conocen a Goldie (Georgia King), una joven madre soltera con una historia turbulenta, se mudó a Los Ángeles con su hija de ocho años, para escapar de la vida de provincia y de la opresión de su racista y cínica madre. Fértil y con necesidad de dinero, Goldie se compromete a actuar como madre de alquiler de David y Bryan, encontrando en ellos una familia sustituta.