En un futuro distante, tecnológicamente avanzado, Tylor es un misterioso joven sin un propósito en la vida, con un estado mental que es difícil de determinar y con facilidad para escapar de situaciones cercanas a la muerte con una actitud infantil. Ni siquiera se da cuenta cuando está en peligro. Tylor tropieza a su manera en la armada del espacio, y pronto gana la orden de un destructor, el Soyokaze (Brisa), para asombro de su teniente, Yamamoto. Resulta mucho para la consternación de Yamamoto, que este barco se considera la vergüenza del ejército, a donde van todos los tipos de personajes que no deberían estar en una nave espacial (Yamamoto y Yuriko Estrella parecen ser los únicos reclutas a bordo que son mentalmente aptos). Sin embargo, gracias al liderazgo excéntrico de Tylor, estos inadaptados llegan a ser finalmente los salvadores colectivos de la humanidad.
Las dos mayores potencias del espacio son La Fuerza Espacial de Planetas Unidos y el Imperio Raalgon (extraterrestres parecidos a elfos).
Uno de los puntos más grandes de la disputa dentro del cuento es la competencia verdadera de Tylor, ya que varios personajes dicen "No puedo decidir si es un idiota o un genio".