Renato Conde y Eva Spencer han vivido muchos años en perfecta armonía junto a sus hijos, Ignacia, Carola y Emilio. En la casa de al lado habitan Javier Ruiz y Pilar Arismendi un matrimonio joven con dos hijos. También llevan una existencia plácida y exitosa.
Todo cambia cuando Ignacia conoce a Gonzalo Ibáñez socio de Javier, y tras un breve noviazgo se casan. En la boda que se celebra en la mansión de los Conde, Gonzalo descubre que el excuñado de su ahora esposa vive con ellos. Los Conde no quieren hablar de lo que sucedió en el pasado.
Decidido, Gonzalo comienza a escarbar en la muerte de su antecesor y se suceden misteriosos acontecimientos en la mansión.
Nadie sabe quién miente y quién dice la verdad. Quiénes son los buenos, quiénes los villanos. En quién se puede realmente confiar o quiénes son de temer. Como en la vida misma.