Al huir de su hermano quien acaba de obtener el trono y en medio de una desolada y poca iluminada montaña Kurou y su sirviente Benkei llegan a apreciar una luz en plena montaña, al llegar hasta ella se percatan que era una casa y en su interior habitaba una mujer muy bella, la cual se dice llamar Kuromitsu quien los recibe en su casa pero tenían una limitación, la cual era el de no poder entrar a la habitación donde duerme, generando muchas interrogantes entres los dos personajes de esta historia.