La historia se desarrolla en un mundo post-apocalíptico, después de que una colisión de meteoritos casi acaba con toda la civilización humana.
Después de esta catástrofe, Connor MacLeod (el protagonista de la película original) y los otros Inmortales abandonan el Juego de luchar entre sí hasta que sólo queda un inmortal para ganar el premio. En cambio, los Inmortales juran preservar el conocimiento y la condición humanas. Ellos desechan sus espadas y se hacen llamar Jettators.
Pero un inmortal, Kortan, se niega a prestar juramento, puesto que aún busca el premio y ahora quiere dominar el mundo. Connor reta a Kortan a un duelo y es derrotado y muerto, como cualquier Inmortal que rompe el juramento está destinado a morir. Sin embargo, con la muerte de Connor llega la profecía de la aparición de un nuevo Inmortal, no ligado por el juramento, que derrotará a Kortan.
Sin oposición por los Jettators y casi imposible de matar-por los mortales, Kortan establece un imperio que controla la mayor parte del planeta, que gobierna desde su fortaleza Mogonda.
700 años más tarde, un joven llamado Quentin Highland muere tratando de defender a su clan, el Dundee, de esclavistas de Kortan. Él es el Inmortal profetizado y vuelve a la vida. Su madre moribunda revela su verdadera identidad como Quentin MacLeod del clan MacLeod, ""El último de los MacLeod"". Quentin se encuentra con el Jetattor Don Vicente Marino Ramírez, quien se convierte en su mentor. Ramírez enseña a Quentin acerca de los Inmortales y su misión para hacer frente a Kortan, y lo entrena en combate.