Después de que su equipo se disolvió, Sho Ota está en sexto grado y está decidido a encontrar nuevos miembros para volver a reunir a los Predators de Momotaro. A pesar de no ser muy bueno, ama el fútbol con todo su corazón. Algún día desea cumplir su sincero sueño de convertirse en un jugador profesional.