Aunque el padre adoptivo de Georgie y sus dos hijos cuidan de ella, su madre adoptiva la odia porque su padre era un criminal acusado de conspiración y murió intentando huir. Conforme van creciendo, sus hermanastros, Abel y Benjamin, se enamoran de Georgie. Cuando ella descubre que es una huérfana, intentará descubrir la realidad relativa a su propio padre.