La ciudad de Ergastulum es una villa sombría llena de ladrones, prostitutas y policías corruptos, donde tienen lugar hechos demasiado atroces incluso para sus habitantes. En este contexto aparecen Nic y Worick, los llamados Handymen, que se encargan de realizar los trabajos sucios que nadie más quiere hacer, hasta que un policía les pide ayuda para acabar con una banda que lucha por el territorio de una de las mafias más poderosas.