Seis equipos científicos distintos que van a estudiar diferentes áreas y aspectos de la Antártida llegan al continente tras años de planificación y millones de dólares invertidos. Las condiciones climáticas del continente son las más frías, secas y ventosas del planeta, y sin la base Scott, centro de las misiones antárticas de Nueva Zelanda, ninguno de los equipos sobreviviría. Los resultados que obtengan podrían ser cruciales para entender mejor los efectos del cambio climático sobre la vida del planeta.