The Chicago Cubs needed a miracle... They got Henry Rowengartner.
Henry Rowegartner es un chico de doce años que sueña con jugar al béisbol en los Chicago Cubs. Un día, de manera fortuita, Henry se rompe un brazo y al quitarle la escayola, meses más tarde, el médico comprueba que sus ligamentos se han soldado de manera extraña y le han conferido a su brazo una fuerza descomunal.