Mady Celliers, una atractiva ama de casa de 60 años, se pasa la vida hablando mal de sus dos hijas y de su marido, un hombre que muestra un extraño comportamiento desde que se ha jubilado. Antoine, el hijo mayor, director de empresa, es incapaz de llevar a buen puerto un negocio: sale de una quiebra para meterse en otra; su hermana Alice pinta obsesivamente madonnas tristes. Annabelle, enfermera en una unidad de cuidados intensivos, intenta desesperadamente salvar a su familia pronosticándole el futuro. Cuando Alice conoce por casualidad a Jacques, un policía solitario y pesimista, estallarán todas las neurosis familiares.