Ambientada en el Quebec rural en los años 30, sigue a la familia Soissons, la cual vive aislada geográfica y psicológicamente. El padre se emborracha con frecuencia y da sermones extraños a sus hijos. La muerte repentina del padre deja a los niños desubicados, ya que no conocen las convenciones sociales. Poco a poco irán cuestionándose sus enseñanzas y descubrirán algunos secretos familiares perturbadores.