Ella no sabe a dónde va, él no sabe de dónde viene
En un embotellamiento en un bajo nivel, en medio de una copiosa lluvia, Alma ve no sólo como “el cielo se viene abajo”, sino también su aparente vida sentimental. En soledad, percibimos toda su angustia. De pronto ingresa Roberto a su automóvil, de forma intempestiva, y de ese cruce surgirá algo similar a una amistad, lo más parecido a la unión de dos personas que llevan una carga demasiado pesada.