El amor siempre tiene un precio
Kat Ellis (Messing), una soltera de Nueva York, tiene ante sí una celebración poco "agradable" en Londres: la inminente boda de su hermana con su ex-novio como padrino de la ceremonia. Temerosa de presentarse sin pareja en el evento, decide contratar los servicios de un apuesto acompañante masculino (Mulroney) y presentarle como su novio.