El joven Randall Everett se ve obligado a abandonar Nueva York para trasladarse con su hermana y su padre hasta África.
Su padre debe realizar un trabajo en una reserva de animales, y Jonathan no está muy ilusionado con el proyecto, sobre todo porque desde la muerte de su madre la familia no está unida.
Sin embargo, cambia de opinión al conocer a una chica de su edad, amante de los animales y, en especial, de Elsa, una pequeña leona que está siendo criada en la reserva.