The light runs out
En 2007, el gobierno del Sur de Nueva Gales desechó un plan para utilizar el agua de los túneles abandonados del tren subterráneo, debajo de la estación St. James de Sidney. En 2008, los rumores al posible encubrimiento por parte del gobierno y las leyendas urbanas sobre esa repentina marcha atrás, harán que un grupo de periodistas encabezados por Natasha Warner se adentren en el misterioso laberinto subterráneo. Ellos bajaron a los túneles en busca de una historia, hasta que la historia los encontró a ellos.