Mike se ha roto el tobillo y, postrado en casa, empieza a ser molestado por un hombre que vive en el piso de enfrente y que tiene violentos terrores nocturnos. Mike se convence de que los terrores nocturnos son una tapadera para planear el asesinato de su mujer. La policía no encuentra pruebas, por lo que Mike contrata a Pearl para que investigue más a fondo. Ella descubre un cadáver, pero no es la persona que ella y Mike esperaban.