Belly no es la misma persona que era al final del verano pasado. Es el último día de colegio y, tras un año difícil, Belly intenta olvidarlo todo en compañía de Steven y Taylor, pero hay cosas que son demasiado difíciles de ignorar. El cáncer de Susannah está empeorando y sabe que no le queda mucho tiempo de vida.
Conrad y Belly vuelven a casa de la playa mientras hablan de su relación y de flirtear. Ella le cuenta que Jérémie admite que siente algo por ella y cómo se besaron.
¡Ojo! Este artículo contiene spóilers de la primera temporada de Heartstopper
Con series como El verano en que me enamoré o Un cuento perfecto, este verano parece venir cargadito de romance, y el próximo estreno de Netflix no es una excepción. Así es, nos referimos a Heartstopper, cuyo estreno, a pesar de no haber batido récords de audiencia en 2022, consiguió hacerse con un puñado de fieles seguidores y con el cariño del colectivo LGTBIQ+. Fans que celebraron con alegría el anuncio de la segunda temporada, que se estrenó en Netflix el pasado 3 de agosto.
Atrás quedaron los días en que la representación de los personajes LGTBIQ+ en las series era nula, anecdótica, o terriblemente tópica (a lo sumo). Y, si bien está claro que aún queda mucho camino por delante, las narrativas queer (y creadas por personas queer) empiezan a tomar el terreno que se merecen. Y Heartstopper es prueba de ello: una serie teen romántica cándida y entrañable, que a pesar de ser terriblemente cuqui, no se corta a la hora visibilizar los problemas que las personas del colectivo experimentan durante la adolescencia. El autodescubrimiento, el primer crush, el cuerpo, los amores no correspondidos… desde la perspectiva de múltiples identidades y sexualidades, no solo la de los hombres gays.