Steven va al Gran Donut. Descubre que la marca de helado Cookie Cat ha sido descatalogada porque un nuevo competidor, Lion Lickers, se ha hecho más popular en ventas.
Cuando vuelve a casa, encuentra a Amatista, Perla y Granate luchando contra los Centipeetles que han invadido la habitación de Steven. Han destruido a la mayoría, pero no han encontrado las gemas que suelen recibir después de hacer desaparecer la forma de gema.
Garnet piensa que la Madre Centipeetle debe estar por ahí y controlando a los demás. Steven caza uno en el frigorífico y encuentra muchos Gatos Galleta en el congelador. Las Gemas le explican que compraron algunas en una fábrica cercana porque sabían que eran sus favoritas, y decidieron comprarle el último lote. Encantado, empieza a cantar el tema de los Cookie Cats de un anuncio de televisión. Entonces muerde un Cookie Cat y su gema empieza a brillar. Amatista le dice que intente invocar su arma, pero Steven no sabe cómo.
Steven cree que sus golosinas favoritas le permiten invocar su escudo mágico...