Tras la agresión de Jo, el equipo queda desolado. Mientras Sandy se siente culpable por no haberla protegido más, Jimmy intenta mantener a todos centrados, pero aumenta la presión sobre él para que vuelva a detener a Malone. Sin embargo, ante la falta de pruebas, Pérez se resiste. Para aumentar su estrés, llegan los inspectores Cole y Jackson, del MIT, y empiezan a descubrir lagunas en su investigación. Asombrados por el hecho de que no se haya llevado a cabo un registro de la granja de Malone, Cole y Jackson realizan el suyo propio. Sin embargo, cuando llegan, Malone no aparece por ninguna parte.