El Inspector Ardilla es encargado de custodiar una nueva arma secreta, desarrollada por el gobierno. El Sonrosado furtivamente gasea con gas adormecedor a nuestro espía y roba el arma. Cuando despierta, Ardilla intentará recuperar el arma antes de que El Sonrosado la duplique y descubra sus secretos y pueda distribuirla con fines malvados.