Seiya y Shun corren bajo la lluvia al salir del Valle del Aire y encuentran un edificio egipcio. De pronto a ambos les llega un olor a muerte y descubren a un monstruo con tres cabezas que está comiéndose a los muertos. Seiya y Shun tratan de escabullirse del monstruo, pero éste los ve y los ataca.
El monstruo ataca a Seiya y trata de comérselo pero, como no puede, lo escupe. El Espectro de la Segunda Prisión, Pharaoh de Esfinge, aparece y se ríe de Cerbero (el monstruo de tres cabezas) y dice que no puede comerse a Seiya porque él no está muerto. Cerbero es el perro guardián del Infierno, él se come a aquellos que fueron avariciosos en vida.