Janet culpa a Tommy por la muerte de su hijo. Tommy planea junto a su padre y el Tío Eddy una mortal venganza. Luego del funeral de su hijo, Tommy pasa momentos difíciles, sobre todo cuando Janet lo responsabiliza del accidente que mató a Connor. Familiares y amigos intentan sacarlo de la depresión. Katy dice que ya no cree en Dios. Sean busca la forma de ayudarla a recuperar la fe. Informan a Jerry que lo mejor será internar a Jeannie en una clínica. Franco presiona a Laura para una nueva oportunidad. Candy informa a Lou que su jefe aceptó dejarla ir.
Tommy lucha contra la tentación de elegir la bebida como el camino para calmar su dolor. Johnny le informa que traen al hombre que atropelló a Connor desde Baltimore. Tommy le pide que le avise dónde y cuándo llega. Recibe una llamada de Sheila que le pide ayuda porque Debbie la está golpeando una vez más. Pero, en lugar de vengarse, Tommy se queda parado, sin hacer nada, mientras Debbie lo golpea también a él. Sean cree haber sido testigo de un milagro al ver lágrimas en el rostro de la Virgen María, porque hay una gotera que le cae justo encima. Tommy, luego de arriesgar su vida para salvar a una niña en la cornisa de un edifico en llamas, descubre que Perroli pidió a Mickey que lo vigile durante su rehabilitación.
Katy ni se inmuta frente al supuesto milagro presenciado por Sean. El padre de Tommy y el Tío Teddy insisten en ser ellos los encargados de vengar la muerte de Connor. Franco intenta, en vano, ver a Laura. Jerry deja a una asustada Jeannie en el hospital. Tommy acepta que su padre y el Tío Teddy disparen contra el responsable del accidente cuando llegue a la Estación Grand Central. Lou llega al departamento de Candy y descubre que no es el único que perdió dinero con esa estafa tan detalladamente planeada. Franco se entera de que Laura se mudó sin decirle nada. Tommy, luego de unas perturbadoras visiones de Jesús, corre hacia la estación de trenes para evitar que su padre y e