Esther no puede llegar a su marido después de una gran pérdida. Ella decide buscarlo. A Evi se le asigna un caso de asesinato, que está vinculado a la presunta pareja de traficantes de personas Sylvia e Ingmar. A Sylvia se le ofrece un trato para testificar contra Ingmar, pero se niega. Por la noche recibe a uno de sus clientes habituales: Eric. Debido a un malentendido, las cosas se salen de control y Eric huye.