El comandante Rocher y Adèle están siendo llamados a una escena del crimen particularmente atroz. Una estudiante de secundaria fue estrangulada, luego le sacaron los ojos... y un testigo presenció el asesinato. Desafortunadamente, es una chica ciega, la mejor amiga de la víctima... Para detener al asesino, el equipo de la DPJ puede confiar en la ayuda de Olivia, una nueva pasante en criminología reclutada por Adele. Y su ayuda es muy valiosa cuando el caso se vuelve muy personal y Adèle es atacada directamente por el asesino