Mientras Camille está de vacaciones en la Costa de Ópalo, conoce a Paul, cuya esposa ha desaparecido en extrañas circunstancias. Comparte sus dudas con Niémans, que inmediatamente se une a ella en el lugar. Niémans llegó a este pueblo durante su infancia, con su hermano y su madre. Mientras dolorosos recuerdos parecen aflorar a la superficie, Niémans y Camille son testigos de un fatal accidente que no parece casualidad. Esto les llevará tras la pista de un temible asesino en serie, que parece matar a cada víctima en el orden de los signos astrológicos.