Antoine Verlay es un policía intuitivo que aprecia la eficiencia y las investigaciones complicadas. Apreciado por su jerarquía, el comandante Pardo le confía un expediente singular. En efecto, en el castillo de Amboise se robó un cuadro que representaba a Ana de Bretaña. Sin embargo, este hurto causó una víctima: se encontró un cadáver en los jardines. Ignorando todo sobre la pintura del Renacimiento, Verlay se ve obligado a colaborar con Florence Chassagne. Esta especialista en historia del arte se muestra brillante pero totalmente desprovista de tacto. Juntos, intentan determinar si la obra a priori no escondía una pintura inestimable...