En este último capítulo de la novena temporada, el equipo de Buscadores de Fantasmas (Ghost Adventures), compuesto por Zak, Nick y Aaron, investigan la antigua cárcel del condado de Licking, en Ohio. La investigación cambiará radicalmente cuando una mujer afirma que un espíritu malévolo la siguió desde la cárcel hasta su casa y ahora la está atormentando a ella y a toda su familia.
Décadas después de que el último preso obtuviera la libertad en esta cárcel del condado de Licking, aún se pueden oir los ecos de las vidas y las muertes dentro de sus muros, todavía resuenan entre las celdas, ahora vacías.
Construida durante la época que se consideró la más importante para las penitenciarias de Estados Unidos, la corrupción tenía cómo resultado la justicia total. La imponente estructura fue diseñada para parecerse más a un castillo medieval que a una prisión y tiene más en común con la Torre de Londres que con cualquier centro penitenciario de la época moderna. El Sheriff y su familia vivieron entre los muros del ‘castillo’, así como los internos, asesinos en serie, incluyendo “The Hand Saw Slayer“, conocida cómo Laura Dell Devlin de 72 años, asesinó a su marido, Thomas Devlin de 75, también estuvieron “The 22 Caliber Serial Killers“, “The Proposal Day Murderer” y otros muchos más asesinos que fueron hospedados aquí, pero la muerte más impactante ocurrió en 1910, una noticia que llegó hasta la prensa nacional, durante la ley seca de Estados Unidos, un detective anti-vicio llamado Carl Etherington trabajaba en Newark, Ohio, su trabajo consistia en cerrar bares que no seguían la estricta ley anti-alcohol que existia en la época.
El condado de Licking se oponía ante esta ley. Existian hasta 58 bares que operaban en el centro de Newark, muchos de ellos, burdeles, el sheriff y el alcalde estaban al tanto de ello. El detective Carl Etherington, involucrado en una pelea con un ex-capitán del departamento de Po