Mientras Walt ha de pagar la extensa factura de su tratamiento e ingreso, su recién ascendido cuñado Hank sufre las consecuencias de su encuentro con Tuco y el primer indicio le ocurre en el ascensor del trabajo ya que empieza a marearse y a perder la compostura.
Jesse recupera la caravana con el dinero que le ha dado Walt, además de un coche y alquila una casa a una joven que vive en la casa de al lado. Como no quieren tratar con otro Tuco y Jesse está muy perseguido por la DEA llega a la conclusión de que pueden manejar la producción y la distribución contratando a conocidos para distribuir su producto en las calles. Walt acepta porque tras pagar la primera fase del tratamiento y su costosa coartada se ha quedado sin dinero.
Llega a Movistar+ la esperadísima segunda parte de la sexta temporada de Better Call Saul, cuyo octavo episodio se estrenó el 12 de junio, y que culminará con el último episodio de la serie el día 16 de agosto.
Por si queda algún rezagado, Better call Saul es el spin-off de la mítica Breaking Bad, ambientada seis años antes de que al profesor Walter White se le ocurriese cocinar metanfetamina. Esta secuela está protagonizada por uno de los personajes secundarios más importantes (no decimos “favorito” porque cada personaje secundario de Breaking Bad es irremplazable) de la serie original, Jimmy McGill.
¿Qué no te suena? Es normal: Jimmy McGill es el nombre verdadero de Saul Goodman (Bob Odenkirk) y la serie se centra justo en eso, en cómo el personaje para de perdedor buscavidas a abogado y estafador profesional. Ahora, esta transformación está llegando a su recta final, y nos quedan unas pocas horas de serie para dejarlo todo bien atado.