Cuando Molly y Ryan comienza un juego de tarot inofensivo no tienen ni idea de los peligros que van a llegar. El juego pronto da un giro preocupante cuando Molly muestra la carta de la muerte y una vela al instante se cae, provocando un incendio. Un fantasma ha sido puesto en libertad. Los cuatro amigos se han enfrentado a sus propios demonios, pero lo que les espera en las profundidades de Bedlam es peor que cualquier cosa que jamás hubieran imaginado.