Cuando una cara conocida del pasado de Helen regresa a Darrowby, James se preocupa de tener que competir por su atención y se presenta para competir contra ellos en el partido anual de cricket de la señora Pumphrey. El resto de la Casa Skeldale se muestra aprensivo, ya que el juego puede ser brutal. Siegfried hace todo lo posible por entrenar a James y conseguir que un reticente Tristán intervenga, pero las cosas no pintan bien para su equipo Darrowby Eleven.