El 16 de enero de 2002 el vuelo 421 de Garuda Indonesia vuela sobre las islas de Indonesia durante la temporada de lluvias cuando se ven sorprendidos por una gran tormenta. El Boeing 737 es sacudido por turbulencias tan poderosas que los pilotos tienen que luchar por mantener el control. Después de perder ambos motores los pilotos se las arreglan para hacer uno de los más espectaculares aterrizajes de emergencia de todos los tiempos.