Asesinatos misteriosos, premoniciones misticas y herederos disgustados están a punto de arruinar los planes que Poirot tiene junto a su amigo Hastings. Los poderes sobrenaturales de las hermanas Tripp y los consejos de Poirot a Emily Arundelpara cambiar su testamento no logran evitar el asesinato de Emily. Poirot decide descubir quien envenenó la medicina de Emily Arundel.
El único testigo de los hechos es Bob, el perro de la familia.