¡Ojo! Este artículo contiene spóilers de la segunda temporada de Los Bridgerton
La serie de época más popular de Netflix regresa a la plataforma con una tercera temporada. Un título que, antes de 2020, nadie hubiese puesto en duda que hacía referencia a Downton Abbey, pero que, lamentablemente para la serie de Julian Fellowes, en 2024 pertenece a Los Bridgerton.
La serie que nos cautivó durante los meses de pandemia estrenó la primera parte de su tercera entrega el pasado 16 de mayo. Para descubrir la segunda, los cuatro episodios que conducirán al final de la temporada, tendremos que esperar hasta el 13 de junio. Ay, Shonda Rimes, ¡cómo te gusta dejarnos en ascuas!
Si la primera temporada se centró en Daphne y Simon, y la segunda dio protagonismo a Kate y Anthony (aunque este empezase pretendiendo a Edwina, aquí no olvidamos), la tercera pone el foco en la relación entre Penelope y Colin (Polin para los amigos).
Tras escuchar cómo la desprecia a sus espaldas por su físico, Penelope Featherington (Nicola Coughan) tira la toalla con Colin Bridgerton (Luke Newton), el caballero del que lleva enamorada desde que la conocimos en la primera temporada. A tal amargo desengaño, se le suma que Eloise le retira la palabra cuándo se entera de que Penelope es la famosa Lady Whistledown, autora anónima que airea los chismes de la alta sociedad. Ante un panorama tan funesto, Penelope decide que ha llegado la hora de encontrar marido, uno que le dé la independencia de continuar con su doble vida, lejos de su familia. Pero debido a su falta de confianza, fracasa estrepitosamente en el mercado nupcial. Pero, cuando Colin vuelve de vacaciones con unos aires de galán renovados, se da cuenta de que algo ha cambiado en Penelope, que le da la espalda cuando siempre le había querido tal y como era. Para recuperar su amistad, se ofrece como mentor para ayudarla a encontrar el marido que se merece.
Esta nueva temporada sigue siendo fiel a la estructura que la hace tan adictiva: un estira y afloja entre los miembros de la pareja protagonista, un juego de tensiones en el que cualquier paso en falso amenaza con condenar el futuro de los amantes (aunque sospechemos que, en el fondo, todo saldrá bien). En Los Bridgerton, la enjundia no está en el destino, sino en el viaje. Un viaje, de nuevo, repleto de color, lujos, frivolidad y éxitos actuales adaptados al estilo musical de la época Regencia. Aunque, eso sí, el contenido “picante” al que Los Bridgerton nos tiene acostumbrados es mucho menor en esta ocasión, y nos preguntamos si estará relacionado con que el físico de Penelope está fuera del canon clásico de belleza. Pero, ¿quién sabe? Quizá los cuatro últimos episodios nos tienen reservada alguna que otra sorpresa interesante…
Ya tienes la primera parte de la tercera temporada de Los Bridgerton disponible en Netflix. Para ver los cuatro últimos episodios, tendrás que esperar hasta el 13 de junio.