Recapitulemos y viajemos al pasado, concretamente, nueve años atrás, cuando Clint Barton, interpretado por Jeremy Renner, se unió al famoso Universo Cinematográfico Marvel en la primera película de Los Vengadores. Un tío majo con unas dotes impresionantes para manejar el arco que vimos más tarde, también, como agente de S.H.I.E.L.D., acompañado a la Viuda Negra en varias misiones. Y sí, le vimos en Thor, aunque fue una aparición tan breve que casi ni cuenta. Luego, la cosa se puso más cruda: el pobre se tuvo que enfrentar a la amenaza de Thanos y sufrir la desintegración de su familia (incluida Linda Cardellini) en un abrir y un cerrar de ojos. Ahora, tras haber pasado años por los bajos fondos como un maleante y perder a sus dos mejores amigos, intenta volver a la normalidad. Pero, ¿qué significa “normalidad” cuando eres un Vengador al que todo el mundo puede reconocer? Lo descubriremos en la miniserie Ojo de Halcón.
Se acerca la Navidad y Clint ha prometido a sus hijos que lo celebrarán en familia. Y, le encantaría, pero tiene otras cosas en la cabeza… su pasado le persigue. Y no solo eso: una joven llamada Kate Bishop ha encontrado el traje de Ronin (cosas que pasan) y unos matones se ensañan con ella. Aunque, como hábil arquera, a la joven no le echa para atrás el combate cuerpo a cuerpo… ¿estaremos ante la nueva Ojo de Halcón?
Solo hemos podido ver dos episodios, lo cual no es suficiente para tener una opinión definitiva, pero en cualquier caso, la serie escrita por Jonathan Igla comparte el tono humorístico y ligero que tienen el resto de películas de Marvel posteriores a Guardianes de la Galaxia. Vemos a una Hailee Steinfeld mordaz y sarcástica, lo que nos recuerda a sus papeles anteriores, en Dickinson o en Al filo de los diecisiete (os recordamos que la actriz también es la dobladora de VI en Arcane, la nueva animación de Netflix). Un personaje obligado a madurar rápido tras la muerte de su padre (Brian D’Arcy James) a manos de los Chitauri en Nueva York, cuando solo era una niña. Su madre (Vera Farmiga), a punto de casarse con un tipo espeluznante (Tony Dalton), dirige una empresa de seguridad, lo que le permite codearse con la élite neoyorquina. Y se supone que también veremos a Florence Pugh como Yelena Belova. En resumen, la serie Ojo de Halcón, basada en el cómic de 2012 de Matt Fraction y David Aja, tiene un reparto de campeonato.
Y a Clint, ¿qué le parece este percal? Por ahora, no sabemos qué nos aguarda la relación entre los personajes: solo sabemos que el Vengador intentará que la joven no se entrometa en sus asuntos. ¿Qué “asuntos”, os preguntaréis? Pues aún no nos queda claro, lo único que podemos decir es que un viejo enemigo de Ronin ha regresado. Ya veremos cómo se desarrolla la dinámica “mentor/protegida”…
Después de Bruja Escarlata y Visión o Loki, Disney+ ha tenido la astucia de estrenar Ojo de Halcón en la época prenavideña. La serie, renunciando a un exceso de efectos especiales (aunque uno se pregunta a dónde fue a parar el presupuesto), nos recuerda que Clint es, ante todo, un padre de familia. No hay magia ni viajes en el tiempo, solo un arco y lucha a la vieja usanza.
Puede que Ojo de Halcón no sea tu Vengador favorito, pero es un personaje entrañable. Además, la miniserie nos cuenta también el origen de su sucesora y será el punto de partida de otro spin-off, Echo, protagonizado por el personaje de Maya López interpretado por Alaqua Cox.
Ojo de Halcón ya está disponible hoy en Disney+.
Artículo escrito en el marco de nuestra colaboración con Disney+.